¿Puede la radio volver a ser el medio de vanguardia?/ Por: Pedro Luis Gutiérrez

¿Puede la radio volver a ser el medio de vanguardia EN VENEZUELA?

*Por: Pedro Luis Gutiérrez

LA LUPA Digital

OBJETIVO: Presentar un análisis crítico que nos aproxime indirectamente a la situación real de la radio en Venezuela, tomando como indicadores sus oportunidades y amenazas.

PROPÓSITO: Dejar un mensaje reflexivo que contribuya con el rescate y el adecentamiento de la imagen y credibilidad de la radio en Venezuela.

OPORTUNIDADES

1.      Ventajas de las nuevas TIC: Las denominadas TIC,  Tecnologías de la información y comunicación permiten a la población  mayor acceso a la información  de manera inmediata, y  a la industria le facilita la inversión de alta gama a bajo costo en relación a precio-calidad.

2.      El medio con mayor penetración: Tiene la ventaja de oírse simultáneamente y de manera gratuita en el hogar, la oficina, el trabajo y hasta en vehículos, incluyendo    todos los estratos sociales.

3.      Los nuevos mercados: Los mercados y productos regionales y nacionales están incluyendo sus anuncios en la radio porque sigue siendo el medio más económico.

AMENAZAS

1.      El miedo económico: Hay miedo de la industria para hacer nuevas inversiones ante las políticas comunicacionales del Estado sobre el espectro radioeléctrico. Hasta la fecha, 86 emisoras de radio han cerrado desde enero de 2022 en Venezuela por orden del Ejecutivo Nacional, alegando diversas razones, de acuerdo con estadísticas del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa-SNTP.

 2.      El manejo empírico: Muchas radios ya muy poco se manejan con sentido de servicio público y ética profesional (Informar, entretener y orientar, en el macro de la Constitución y nuestras leyes); priva solamente lo mercantilista por parte de personas colaboracionistas y oportunistas (Militares retirados, contratistas, financistas de la política partidista de turno y ejecutores de la viveza criolla, que se hacen de cualquier radio para sus intereses muy particulares) ajenas al medio radial y a la comunicación social en general.

3. Deterioro de la credibilidad informativa: 

A) El exceso de confianza de muchos advenedizos en la radio, que firman con el “dedo gordo” y que de paso se autodenominan reporteros comunitarios, comunicadores populares y hasta radiodifusores alternativos,  amparados por un papel oficial de Productor Nacional Independiente, el cual no los autoriza para el intrusismo laboral y menos para  el ejercicio ilegal de la profesión de locutor, periodista o comunicador social, sino únicamente para producir  contenidos y buscar sus patrocinadores; esto les ha llevado en muchas ocasiones a engañar a la sociedad, a desinformar, a estafar con falsas pautas publicitarias y a creerse innovadores  y creativos de una nueva radio, un medio que le es ajeno. Seguramente desconozcan que, DE LO CREATIVO A LO RIDÍCULO HAY UN SOLO PASO. 

B) La falta de conocimiento y experiencia de muchos dueños de radios, quienes se han autocensurado, no precisamente por miedo, sino  para complacer a unos pocos que les pagan para que digan o no digan equis cosa. 

C) Algunos concesionarios o seudo directores de radio se dedican a la explotación laboral y contratación de personal NO IDÓNEO, obviamente para no pagar lo justo a verdaderos profesionales y con el salvaje afán de meterse unos pocos dólares, aun a sabiendas de que sacrifican la decencia radial.

 Se observa con preocupación y eso es del dominio público, que en la mayoría de veces ese personal contratado como “productor nacional independiente” es colocado como periodista sin tener la titulación o capacitación profesional para ello, INCURRIENDO EN LA PRÁCTICA ANTI ÉTICA de “copiar y pegar” en sus llamados noticieros las noticias que otros medios publican en internet o en las redes sociales, que luego estos sujetos invasores las transmiten como propias; seudo locutores improvisados y NO CERTIFICADOS POR NINGUNA UNIVERSIDAD, como lo establece la ley vigente; perifoneadores improvisados ellos, quienes desconocen los principios Constitucionales y legales que regulan el uso del espectro radioeléctrico y los alcances de la libertad de expresión e información; el buen empleo de la ORTOLOGÍA Y LA FONÉTICA en radio; el irrespeto por la audiencia que se hace notar cuando hacen gala de risas burlonas contando chistes de mal gusto,  difundiendo informaciones tendenciosas, falsas y sin fuentes, como anunciar la muerte de personalidades, simplemente porque otro medio lo publicó o porque alguien les llamó y les comentó; anunciar falsas encuestas que supuestamente les certifican un “primer lugar de sinfonía”, pero que la realidad de la calle dice que “No las escuchan ni siquiera los planteros”. 

 Es lamentable e indignante  oír a diario en muchas radios a estos fulanos  desprestigiando el  verbo y la  Gramática de la lengua castellana de Don Andrés Bello, quien posiblemente se debe retumbar en su eternidad  cada vez que oye barbaridades lingüísticas, tales como:

 “Voy a subí pa’ rriba”

 “Vamoj a salí pa’ fuera”

“El muchacho joven”

 “Aquí habemos personas curtas”

Y hasta “Hubieron” muchos incautos que les creyeron. 

Es muy lamentable que muchas de estas barbaridades ocurran en la radio de hoy con el aval sin pronunciamiento de algunos seudo radiodifusores o directores radiales en Venezuela, particularmente y con mayor gravedad en Lara, Aragua y Carabobo.

Por lógica se ha de pensar que el Sindicato de radio de Lara (O lo poco que queda de él), la nueva directiva de la Cámara de Radio en Lara y nuestro querido Colegio Nacional de Periodistas-CNP- tendrán algo que decir sobre este tema, que no es nuevo, pero día a día se acentúa. Las esperanzas son las últimas que se pierden, como dice el refranero popular venezolano, en virtud de lo cual pienso que, SÍ, puede la radio volver a ser el medio de vanguardia, pero uniéndonos, coordinando esfuerzos y trabajar sobre el logro de este anhelo profesional para despertar el interés de escuchar una radio decente, con profesionales de verdad y la calidad de contenidos de programación que se merece nuestra audiencia y anunciantes publicitarios, en el marco del respeto y acatamiento de nuestra Constitución y leyes de Venezuela.

Sinceramente:

*Pedro Luis Gutiérrez

Periodista titular CNP.8.544/ Locutor titular 7.393/ Técnico de Radiodifusión 6.528, Especialista en Estrategia Comunicacional y Criminalística/ Editor Creativo de LA LUPA Digital. 

Venezuela 10 de diciembre de 2022